CREADOS PARA VIVIR POR SIEMPRE
Grupos familiares (4)
Julio 5/ 2009
Pastor: Luís Fernando bautista fdo
Dios ha plantado eternidad en el corazón de los hombres.
Eclesiastés 3:11
Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin.
- Esta vida no es solo esto que vivimos en la tierra, tan solo es el anticipo del propósito de Dios para con el hombre. Será mucho más tiempo el que pasemos de aquel lado de la muerte, en la eternidad.
- La tierra es el escenario donde nos preparamos para la eternidad “como el niño que ase la primaria en la escuela” mirándolo desde el punto de vista espiritual, podríamos decir que es el estado de inocencia.
- Al ingresar ala segundaria le podríamos decir el estado de conciencia.
- El hombre fue diseñado por Dios para que viva eternamente. Aunque sabemos que todos hemos de morir, la muerte a nuestro juicio párese injusta e ilógica. pensamos que deberíamos de vivir para siempre, es un hecho que nos cuesta aceptar. pero es una realidad establecida por Dios. Hebreos 9:27-28 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio, así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan.
- Tu cuerpo terrenal es una simple residencia temporal para tu espíritu. Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado.
- La vida terrenal nos brinda muchas opciones, pero la eternidad solo nos da dos: el cielo o el infierno. Tu relación con Dios en la tierra determinara que tipo de relación tendrás con EL en la eternidad. Si aprendes a amar y a confiar en Jesucristo, tendrás la invitación para estar toda la eternidad con EL.
Por otro lado, si rechazas su amor, perdón y salvación, pasaras la eternidad apartado de Dios para siempre.
Juan 12:48 El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.
Proverbios 1:24-26 Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese, Sino que desechasteis todo consejo mío Y mi reprensión no quisisteis, También yo me reiré en vuestra calamidad, Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis;
· Esta vida solo es el preámbulo de la venidera.
· Ya que fui creado para vivir para siempre, ¿Qué debería dejar de hacer, y que debiera comenzar a hacer hoy?
|